Sofocos: Cómo evitar los típicos síntomas de la menopausia

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Sofocos: Cómo evitar los típicos síntomas de la menopausia

Sofocos, insomnio, aumento de peso,… las mujeres saben perfectamente cuáles son los síntomas de la menopausia o climaterio. Lo que quizá no sea tan sabido es que existen sustancias, como las isoflavonas de soja, que ayudan a reducir o mitigar estos cambios físicos que alteran la vida de muchas mujeres cuando llegan  más o menos a los 50.

Dependiendo de la intensidad de los síntomas quizá sea necesario un tratamiento hormonal, pero la verdad es que en la gran mayoría de casos no es necesario. Tomando complementos específicos, introduciendo algunos pequeños cambios de hábitos y rutinas y con una buena dosis de paciencia los síntomas suelen llevarse mucho mejor.

¿Quieres saber con más detalle a qué edad empieza la menopausia y cómo aliviar los molestos síntomas ?

sofocos

El por qué de los sofocos y los demás síntomas de la menopausia

Al llegar a cierta edad, entorno a los 45 o 50 años, se va reduciendo la producción de hormonas femeninas, básicamente estrógenos. Esto hace que durante un periodo de tiempo más o menos largo (lo normal son entre 2 y 5 años) empiecen a aparecer todo un conjunto de síntomas como resultado de esta reducción de hormonas femeninas.

La menopausia es una etapa de intensos cambios físicos y emocionales por el que una parte de las mujeres pasan de puntillas sin apenas notar nada.

En cambio, la gran mayoría, van entrando poco a poco en este periodo hasta adentrarse de pleno en ella sufriendo síntomas más que evidentes.

Por ejemplo, al principio es normal tener las reglas irregulares y más espaciadas, empieza la disminución del deseo sexual, o la sequedad vaginal. Y poco a poco estos síntomas van ganando intensidad y se van sumando otros como la hinchazón, los típicos sofocos, la irritabilidad, el insomnio o la descalcificación de los huesos.

Cómo aliviar los síntomas de la menopausia

Durante un tiempo este será el día a día de muchas mujeres, que intentarán adaptarse a estos nuevos cambios. Pero ¿quién puede convivir todos estos síntomas sin que eso no afecte para nada al ritmo de vida y trabajo normales?  Eso es muy difícil por no decir casi imposible.

La etapa de la menopausia no es algo fácil. Hay que aprender a convivir con todos los síntomas que van a apareciendo.

Tienes que ponerte las pilas para empezar a hacer algo de ejercicio si es que no lo estabas haciendo ya. Salir a caminar puede ser muy útil para el insomnio.

Si además vigilas tu dieta para que sea sana y equilibrada todo esto te ayudará a controlar  tu peso par que no aumentes demasiado.

En los casos leves o moderados incluso puedes contar con los suplementos a base de isoflavonas, una alternativa natural a la terapia hormonal con fármacos (reservada para los casos de más gravedad porque no está exenta de riesgos).

Qué son las isoflavonas

Las isoflavonas son compuestos muy parecidos a los estrógenos y en el cuerpo de la mujer tienen una función similar.

Por eso se estima que pueden ayudar a mejorar los síntomas. Ante la falta de estrógenos que provoca la menopausia, las isoflavonas actúan como sustitutos de estas hormonas femeninas.

Las isoflavonas se encuentran en alimentos vegetales, fundamentalmente en la soja. Para asegurar la ingestión de una dosis exacta es aconsejable tomar isoflavonasen forma de comprimidos o cápsulas y no confiar en la dosis que podamos tomar a través de la alimentación. 

Como decíamos, en los casos de menos gravedad, los complementos a base de isoflavonas pueden contribuir a:

-reducir la intensidad y frecuencia de los sofocos, así como el insomnio o el nerviosismo.

-reducir la sequedad vaginal

-prevenir frente a la osteoporosis

-disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares

Es aconsejable tomar los comprimidos o cápsulas de isoflavonas con las comidas y hay que tener en cuenta que los antibióticos pueden reducir el efecto de las isoflavonas.

 

Estos son algunos consejos que te ayudarán a soportar un poco mejor los sofocos y el insomnio típicos del climaterio.

¿Qué te parecen? ¿Tomas isoflavonas o lo que te funciona mejor es el ejercicio?

 

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