La episiotomía es una de esas cosas de las que nada sabes hasta que no te quedas embarazada. En ese momento afloran un montón de dudas e inseguridades y se empieza a buscar información. Como sabemos que eso ocurre queremos aclararte algunos aspectos con los que quizá tengas dudas.
¿Para qué se hace la episiotomía? ¿Cuál es el riesgo de desgarro del perineo? ¿Vas a necesitar más puntos después del parto si te hacen una episiotomía?
No te preocupes, seguro que todo irá estupendamente pero saber a lo que te vas a exponer no está de más. Cuando empiezas a prepararte para el nacimiento del bebé toda información es poca.
Qué es la episiotomía
Hace ya muchos años se instauró la episiotomía como una práctica habitual. Casi en la mayoría de partos se hacía un pequeño corte en la zona del perineo, la parte entre la vagina y el ano.
La finalidad de la episiotomía era agrandar la obertura vaginal, haciendo este corte preventivo se pretendía que la salida del bebé fuera más fácil.
También se pretendían evitar los desgarros que podían aparecer si no se hacía la episiotomía y que se consideraban más difíciles de cicatrizar que un simple corte.
¿Siempre es necesario hacerla?
Como veníamos diciendo, hace unos pocos años hacer episiotomías en el momento del parto era un procedimiento rutinario. Era algo por lo que pasaban todas las mujeres porque se consideraba que las ventajas superaban los inconvenientes.
Actualmente se ha visto que solo es necesaria en algunos casos y no en todos. Con algunas excepciones, en la mayoría de casos no tendrían por qué practicarse.
Si la ayuda antes y durante el parto es la adecuada puede que se sufra algún desgarro pero leve y de poca importancia, o incluso que no se lleguen a sufrir ni un desgarro.
Qué inconvenientes tiene
La episiotomía es indolora en el momento en que ese realiza, ya que la epidural (o la anestesia local si es necesario) impiden que se note. Pero sí es cierto que pasadas unas horas, cuando se acaba el efecto de la anestesia, aparece el dolor y las molestias.
Antes se creía que un corte hecho a bisturí era mucho más fácil de cicatrizar que un desgarro, pero en realidad este corte suele ser más profundo y suele necesitar más puntos que un desgarro natural.
Se ha visto que la recuperación sin episiotomía es mucho mejor y más rápida, algo que ayuda a tener más fuerzas para cuidar al bebé o darle el pecho o tener relaciones sexuales pasada la cuarentena.
Pero todo eso no significa que no puedas recuperarte bien si en tu caso llega a ser necesario hacer una episiotomía. Piensa que en la gran mayoría de casos son cortes pequeños que requieren pocos puntos.
¿Cómo se puede evitar?
Hay que empezar ya durante el embarazo a preparar la zona perineal. Con la ayuda de aceites hidratantes y un masaje especial puedes hacer que la piel sea más elástica. En este videoconsejo te explicamos paso a paso como hacer un masaje perineal.
Algo que también reduce la probabilidad de episiotomía es la postura durante el parto. Los partos en los que la madre no está recostada, por ejemplo si está de cuclillas, de lado o en las bañeras especiales, se reducen las episiotomías o incluso también los desgarros.
¿Y después de una episiotomía, qué?
La vagina y el perineo son zonas muy sensibles. Con movimientos bruscos al levantarse o sentarse es fácil que se abra algún punto. Así que reposa y déjate cuidar.
Además, por están donde están (muy cerca del ano) no sería extraño que se infectara la herida si la higiene y los cuidados no son los adecuados.
Así que lo importante después de una episiotomía (igualmente después de un desgarro) es:
- lavarse todos los días con la ayuda de un jabón íntimo o un jabón especial que contenga sustancias cicatrizantes
- secarte bien antes de vestirte
- no utilizar tampones
- utilizar compresas, salvaslips y ropa interior de algodón
- cambiar las compresas con frecuencia
- vigila tu dieta para evitar el estreñimiento, con el esfuerzo podría abrirse algún punto. Si fuera necesario podrías tomar algún laxante que el médico te recomiende
Ah, y no te olvides de la gimnasia hipopresiva y de los ejercicios de Kegel (en este enlace te explicamos cómo hacerlos). Eso te ayudará a recuperar la musculatura del suelo pélvico y evitar la incontinencia en cuanto pases la cuarentena.
La episiotomía sigue siendo una técnica muy utilizada aunque se demuestre que ni las ventajas son tantas ni es necesaria siempre. Pero eso no significa que no deba hacerse en todos los casos, ya que en algunos puede ser de inestimable ayuda. Pero eso sí, está claro que no es una intervención que deba hacerse de manera rutinaria sin más.
Pero lo más importante es que, ocurra lo que ocurra el día de tu parto, no te preocupes, verás como todo va perfecto y te recuperas rapidísimo siguiendo estos consejos ;)
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