Cuando hablamos de dietas saludables y enumeramos los alimentos ricos en omega 3 no faltan en la lista el pescado azul ni tampoco los frutos secos. En cambio hay otros alimentos donde también podemos encontrar ácidos grasos esenciales: en las semillas.

La cuestión es que las semillas comestibles son las grandes olvidadas pero contienen cantidades muy importantes no sólo de omega 3, también de otros nutrientes básicos en la dieta como el hierro, calcio o magnesio.

Por eso hoy te hablaremos un poco de las semillas de lino y sus propiedades, de las semillas de girasol, de sésamo, de calabaza o incluso de las propiedades de las semillas de chía. Da igual cuál escojas, puedes combinarlas y comerlas como y cuando quieras.

Si quieres conocer algo más sobre qué te aportan todas estas semillas y quieres algunas ideas para añadirlas a tus platos, enseguida te lo contamos.

Las semillas, ricas en omega 3

Las semillas son alimentos ricos en grasas, lo que se conoce como lípidos. La ventaja es que no se trata de una grasa perjudicial que se acumula en forma de colesterol. Son grasas insaturadas, ácidos grasos esenciales beneficiosos para el organismo y que sólo podemos obtener a través de la dieta.

Un ejemplo bien claro es el Omega 3, que es necesario para reducir el colesterol malo a la vez que ayuda a aumentar el colesterol bueno. También ayuda a tratar la hipertensión.

Algunos estudios empiezan ya a apuntar que puede ser útil durante la menopausia para aliviar los sofocos y otros típicos síntomas, también por su efecto antiinflamatorio sería útil en alérgicos. Incluso para tratar algunas enfermedades oculares degenerativas.

Semillas, buena fuente de nutrientes esenciales

Las semillas son muy ricas en proteínas vegetales, así que pueden formar parte de una dieta vegetariana si quieres reducir o dejar de comer productos de origen animal.  

También contienen muchísima fibra, las semillas de lino son ideales para evitar el estreñimiento e ir de forma regular al baño. La fibra también ayuda a reducir la ansiedad y el picoteo, porque sacian durante más tiempo.

Son una fuente de calcio, sobre todo el sésamo o la chía. También de hierro, magnesio, fósforo, zinc y vitaminas esenciales.

Ideas prácticas para añadirlas a tus menús

Actualmente el aporte de omega 3 y otros ácidos grasos esenciales a la dieta es más bien escaso. Mucha gente no come pescado y a los frutos secos injustamente se les ha colgado el sambenito de “alimentos que engordan”, así que no es muy habitual su consumo.  

Una buena solución para hacer nuestra dieta más saludable sería añadir unas semillitas de girasol, de calabaza, de sésamo o de chía a nuestros platos.

Si no las has probado nunca te damos algunas ideas para que te sea más fácil. Por ejemplo,

• puedes añadirlas al yogur
• encima de una crema de verduras o cualquier puré están estupendas
• incluso si te preparas batidos de frutas o batidos verdes puedes añadir unas semillas
• añade semillas a las ensaladas variadas
• también a las ensaladas de arroz y pasta
• puedes comprar pan con semillas
• puedes dejar en remojo dos cucharadas de semillas de chía con leche de almendras o de coco. Añade encima unos trozos de fruta y verás que desayuno o qué merienda ¡para chuparse los dedos!

Fíjate en que las semillas de girasol no lleven sal añadida. Algo a tener en cuenta también es que las semillas de lino, sésamo o chía se deben masticar muy bien.

Todavía mejor es tomarlas molidas, para aprovecharlas completamente (para evitar que se oxiden los ácidos grasos tienes que comértelas justo después de molerlas). En el caso de las de girasol o calabaza no hay problema porque son de mayor tamaño.

No lo pienses más y aprovecha para comprar hoy unas cuantas semillas comestibles para empezar a hacer tu dieta más saludable. Añadir alimentos ricos en omega 3 a tus platos es una apuesta segura.

¿Qué tipo de semillas te gusta? ¿Las comes con frecuencia?