El título del post no es más que lo que nos decía Javier en la farmacia hace un par de días, cuando nos visitó en busca de remedios para el dolor de dientes que sentía al tomar alimentos fríos o calientes.
Este tipo de dolor dental es bastante frecuente y puede que solo mirando la siguiente imagen lo recuerdes. Es un dolor muy característico, bastante intenso y que suele durar apenas unos segundos.
También se conoce como sensibilidad dental o hiperestesia dentinaria y hoy queremos contarte por qué aparece y qué remedios existen para acabar con los dientes sensibles.
¿Cuándo aparece la sensibilidad dental?
Las personas que sufren sensibilidad dental suelen percibir dolor de dientes cuando experimentan un cambio de temperatura, por ejemplo al beber o comer algo frío o caliente o incluso al respirar aire frío.
También puede aparecer al ingerir alimentos ácidos o dulces y cuando se ejerce presión sobre los dientes afectados, por ejemplo al cepillarlos o tocarlos.
Es un dolor intenso y de corta duración, ya que cuando se retira el estímulo que lo produce, el dolor desaparece.
Si ahora no puedes acabar de leer el post en este vídeo tienes un estupendo resumen ;)
¿Y por qué duelen los dientes con el frío o el calor?
Unos dientes fuertes y sanos no duelen, ya que están perfectamente protegidos por el esmalte, una capa extremadamente resistente que recubre la parte “viva” de los dientes, llamada dentina y al decir “viva” nos referimos a que puede hacernos sentir dolor.
En la imagen (de www.sensodyne.es) puedes ver el esmalte en blanco y la dentina en un color carne.
La dentina puede quedar al descubierto por varias razones, por ejemplo cuando se daña el esmalte (por un cepillado demasiado agresivo, una caries,...) o cuando hay algún problema en las encías y estas se retraen dejando al descubierto la parte del diente que queda debajo de la encía, donde en lugar de esmalte hay una capa llamada cemento que también se puede dañar.
En estos casos es cuando suelen aparecer los problemas de sensibilidad dental ya que la dentina no está preparada para entrar en contacto con agentes externos, como alimentos o cepillos de dientes y permite que las terminaciones nerviosas que hay en el interior de los dientes (el nervio que en ocasiones nos “mata” el dentista) noten la presencia de cualquier intruso, provocando dolor.
Cómo acabar con el dolor de dientes
En ocasiones detrás de los dientes sensibles se esconde algún mal hábito de higiene dental que hay que corregir para acabar con el problema, otras veces la sensibilidad dental puede ser la punta del iceberg de algo más grave, como la enfermedad periodontal.
Debes tener en cuenta que cuando el esmalte se daña ya no hay vuelta atrás, el daño es irreversible, así que si empiezas a notar tus dientes más sensibles toma nota de las siguientes recomendaciones y síguelas al pie de la letra.
¿Cómo te cepillas los dientes?
Cepillarse los dientes correctamente, como todo, tiene sus secretos. Son muchas las personas que al cepillarse ejercen demasiada presión sobre los dientes o utilizan técnicas que favorecen la retracción de las encías.
Para que compruebes si lo estás haciendo bien, te dejamos con un tutorial de cepillado de nuestra compañera Carmen Torres del blog Farmalista.
¿Usas el cepillo correcto?
Olvídate de los cepillos duros si no quieres dañar tu esmalte e invierte en un cepillo dental suave, te decimos que inviertas porque no sirve cualquier cepillo de dientes, si vas al supermercado es probable que acabes comprando un cepillo con filamentos de plástico que pueden arañar el esmalte. Tal y como dice Carmen en el anterior vídeo, asegúrate que tu cepillo tenga las cerdas de tynex.
No puedes olvidarte de cambiar tu cepillo cada dos meses, un cepillo desgastado no le hará ningún bien a tu esmalte.
¿Qué hay de la higiene interdental?
Si no acostumbras a limpiar los espacios que quedan entre los dientes, en ellos se va acumulando placa dental y esto favorece la inflamación de las encías y su retracción.
Si no quieres que tus dientes se queden al descubierto, acostúmbrate a usar hilo dental entre todos tus dientes, no solo en aquellos espacios donde se acumula comida.
¡Ah! Y nada de usar palillos ;)
¿Eres fan de los blanqueadores dentales?
En este caso, debes tener en cuenta que algunos tratamientos blanqueadores son muy agresivos y pueden dañar el esmalte.
Si quieres blanquear tus dientes primero visita al dentista para que compruebe el estado de tus dientes y te recomiende el mejor tratamiento.
Cuidado con los alimentos ácidos
Los alimentos ácidos como algunas frutas, el vino, los refrescos o los zumos de cítricos también pueden dañar el esmalte, sobre todo si después de comerlos o beberlos te cepillas los dientes con intensidad.
Si sufres sensibilidad dental es recomendable no abusar de estos alimentos y enjuagarte la boca con agua después de consumirlos, para cepillarte los dientes un par de horas después.
Bruxismo
Rechinar los dientes es otra de las causas por las que se puede dañar el esmalte, si por la mañana te levantas con dolor de cabeza o mandíbula puede que sufras bruxismo, clica en el enlace si quieres más información y no te preocupes, solo tienes que acudir al dentista, tiene fácil solución.
Revisión anual con el dentista
No te olvides de acudir a tu cita anual con el dentista, recuerda que la sensibilidad dental puede también ser causa de afecciones en la encías, que en ocasiones tienen difícil solución.
Remedios para la sensibilidad dental
Aunque llegues un poco tarde y ya tengas parte del esmalte dañado, no desesperes, en tu farmacia puedes encontrar productos de higiene dental como pastas, geles y colutorios para dientes sensibles que te ayudarán a solucionar el problema.
Dentífricos y colutorios para dientes sensibles
Son productos como los que puedes ver en la imagen que contienen activos como el nitrato potásico o acetato de estroncio que actúan impidiendo que el nervio del interior del diente note el estímulo que provoca el dolor.
También suelen contener flúor para prevenir la aparición de caries y fortalecer y remineralizar el esmalte.
Geles desensibilizantes
Los geles desensibilizantes son geles con una mayor concentración de activos que las anteriores pastas de dientes y colutorios. Permiten hacer un tratamiento de choque para reducir la sensibilidad dental, consolidando el esmalte y la dentina.
Si sientes dolor de dientes o molestias al comer o beber alimentos fríos o calientes, puedes utilizarlos durante un periodo de 2 a 4 semanas.
Aplícalos, después del cepillado, directamente sobre las zonas sensibles, con el dedo o con ayuda del cepillo de dientes.
No se deben aclarar.
Una vez terminado el tratamiento con el gel, deberás seguir usando un dentífrico y un colutorio para dientes sensibles de mantenimiento. Si dejas de usarlos, es probable que el problema vuelva aparecer.
¿Sufres dolor de dientes o sensibilidad dental? ¿Nos cuentas qué es lo que mejor te funciona?
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