Está claro que comer sin gluten es algo indispensable para un celíaco. En cuanto aparecen los síntomas y se confirma la intolerancia al gluten hay que empezar a buscar alternativas.
Pero, ¿tiene sentido llevar una dieta sin gluten si no eres celíaco?
El gluten es una proteína que no es esencial para el organismo, en cambio sí lo son los nutrientes que lo acompañan presentes en los cereales. Es cierto que en algunos estudios ya se empieza a demostrar que está asociado a varias enfermedades autoinmunes, reacciones inflamatorias y problemas digestivos como hinchazón o estreñimiento pero también verdad que ha aumentado el número de personas que han decidido comer sin gluten creyendo que van a llevar una dieta más sana o les va a ayudar a adelgazar sin más.
Mientras algunos consideran que no hay problema, otros en cambio afirman que a la larga suprimir el gluten de la alimentación comporta más riesgos que ventajas si no existe un diagnóstico de intolerancia o una enfermedad relacionada detrás.
Entonces, ¿qué ocurre si dejamos de comer porque sí alimentos con gluten sin tener intolerancia al gluten? ¿Comer sin gluten es sinónimo de alimentación saludable?
¿Por qué algunas personas siguen una dieta sin gluten?
Siempre relacionamos el gluten con la celiaquía y con síntomas como las diarreas, el dolor abdominal, la pérdida de peso o la anemia. Pero en los últimos años se ha visto que la sensibilidad al gluten puede aparecer sin mostrar síntomas digestivos importantes, sobre todo en adultos.
Además el gluten puede estar relacionado de alguna manera con enfermedades como hipotiroidismo, artritis reumatoide, diabetes tipo I o psoriasis entre muchísimas otras.
En todos estos casos se pueden hacer pruebas médicas para determinar la intolerancia o sensibilidad y puede justificarse una dieta sin gluten para conseguir una mejoría de los síntomas (siempre bajo la supervisión de un profesional).
Por otra parte, en los últimos años se ha extendido el rumor que afirma que dejar el gluten ayuda a perder peso o a tener más energía y vitalidad y por eso muchos se han sumado a la moda de las dietasn sin gluten.
Esto no es cierto y no hay estudios que lo demuestren. Si tomabas cantidades elevadas de pan, cerveza o pasta y ya no lo haces puede que pierdas algo de peso, pero no se debe al gluten, sino a un cambio de hábitos y alimentos.
Si quieres adelgazar de forma saludable puedes dejar o no el gluten, pero si quieres resultados la única opción es seguir estos consejos para perder peso de forma saludable.
Seguir una buena dieta sin gluten no es fácil
El gluten simplemente es una proteína que se encuentra en cereales como el trigo, el centeno, la cebada, la avena, la espelta o el kamut. Además también se puede encontrar en muchos alimentos procesados a los que se ha añadido en forma de harina, sémola, fécula o almidón.
Aunque es verdad que quizá no necesitamos gluten en nuestra dieta, sí que necesitamos los nutrientes de los cereales que lo contienen y también los beneficios de la fibra.
Seguir una buena dieta sin gluten no es tan simple como cambiar los alimentos a base de trigo por sus sustitutos elaborados con maíz o arroz. Para obtener las proteínas vitaminas y minerales que aportan los cereales integrales, además de seguir comiendo importantes raciones de frutas y verduras, tendríamos que añadir a nuestra dieta otros alimentos como el mijo, la quinoa, el amaranto, el trigo sarraceno o el teff.
El principal inconveniente de estos alimentos es que:
-no son tan accesibles
-normalmente tienen un precio un poco más elevado y
-no son tan habituales, ni en las tiendas ni en los restaurantes
Algo que sí es verdad es que al comer sin gluten la tendencia es destinar un poco más de tiempo a planificar los platos y eso acostumbra a ser bueno para tu salud. La clave está en analizar cada menú y comprobar que en general es equilibrado (aunque a decir verdad, esto es lo que tendríamos que hacer siempre en todas las dietas, lleven gluten o no).
Alimentos sin gluten procesados, ¿son saludables?
Tampoco creas que todos los alimentos especiales “sin gluten” que encontrarás en el supermercado son siempre saludables. Muchos son igualmente alimentos procesados hechos a base de harinas refinadas y llenos de ingredientes nada aconsejables.
Las recomendaciones de no comer en exceso magdalenas, galletas, bollos o alimentos de este tipo es la misma para los que comen con y sin gluten. Hay que prestar atención siempre al etiquetado porque el azúcar, la sal y las grasas pueden estar igualmente presentes.
Para acabar, algo muy importante, si notas molestias o crees que los síntomas que padeces están relacionados con el gluten no dejes de comerlo, antes acude a tu médico para hacerte una buena analítica y hasta una biopsia si se considera necesario. Si dejas el gluten por tu cuenta los resultados podrían no ser del todo fiables.
Y sobre todo no creas el mito que sólo dejando el gluten vas a adelgazar. Lo importante es tu salud y que te preocupes llevar una dieta saludable que te ayude a evitar enfermedades, sea con gluten o sin él.
¿Te habías planetado eliminar el gluten de tu dieta? Cuéntanos por qué.